Una de las fabulosas ventajas que tiene la orografía de los fondos marinos del mediterráneo a la altura de Cartagena es la poca distancia de la costa a la que se encuentran las cotas de aguas profundas.
Saliendo del Portús en kayak y paleando un hora te puedes poner a 4 millas de la costa, sobre la cota de los 100 mts de profundidad. Pero si se palean otros 40 minutos más te colocas rápidamente en la cota de 1200-2000 mts. Esto es mucha agua muy cerca de la costa, ideal para el avistamiento de Cetáceos y ahora, estamos en época de avistamiento.
Hay que buscar el día en que el agua esta hecha un plato: es más fácil descubrir el chapoteo y la espuma a lo lejos y más llendo en piragua, con el punto de vista tan bajo.

Este domingo pasado salimos a probar la suerte (que tuvieron otros la semana anterior), pero nos faltó palear los 40 minutos finales para llegar a los 1000 mts. No hubo suerte. Pero a mediodia, se ven las cosas de otra manera. Hay que salir temprano.

     
  Desembarco y buceo en las palomas  
  Desembarco y buceo en las palomas  

De recogida al paso por la isla de las Palomas y aprovechando el poco oleaje y el nivel tan bajo de la marea pudimos desembarcar entre la rocas de una cueva (algo bastante complicado cualquier otro día) y darnos el primer buceo del año, pero que apenas duró media hora. Está el agua muy fria todavía pero llena de miriadas de minúsculos alevines de montón de especies.
A la salida del agua estuvimos jugando y contemplando un buen rato a una pareja de cangrejos mientras cazaban lombrices y que lejos de huir buscaban la sombra de mi cámara y mi pierna para protegerse del sol. Y es que hace mucho calor, incluso para los cangrejos.