A finales de septiembre la Consejería de Educación aprueba un Plan Integral de Aprendizaje de Lenguas Extranjeras (PIALE), con un presupuesto de 132.853 euros. El Plan es interesante porque, en resumen, permite a los centros escolares no adscritos al Programa Bilingüe ofertar a un grupo pequeño de alumnos del primer ciclo de Primaria clases gratuitas de refuerzo de Inglés.

El problema surge a la hora de analizar la puesta en marcha que hace la Consejería de este PIALE. Para empezar, solo deja 15 días para presentar la solicitud. Resulta prácticamente imposible completar los trámites que exige la convocatoria en el plazo de 15 días, pues hay que elaborar el Proyecto y completar unos anexos, para lo cual es necesario elaborar un listado de alumnos/as y solicitar a las familias su autorización, previa información del mencionado PIALE. ¿Por qué las prisas?

Otro problema reside en la financiación del PIALE. Resulta que son los centros educativos, con el director al frente, los que deben contratar a una empresa que es la que va a dar las clases de refuerzo de inglés a los alumnos/as. Pero el centro educativo, el director, no tiene a su disposición el dinero contante y sonante con el que hacer frente a esa contratación. Esto ocasiona un problema difícil de resolver para los centros públicos, en comparación con los concertados y privados: los primeros no cuentan con una caja, o financiación independiente, con la que adelantar pagos. De este modo resulta absurdo plantear ni siquiera la posibilidad de contratar a nadie. ¿Quién va a realizar un trabajo que no sabe ni cuándo ni cuánto le van a pagar?

Es decir, resumiendo, la Consejería de educación libra un dinero para que centros educativos privados o concertados contraten a empresas privadas que darán inglés gratis a los alumnos que esos centros educativos decidan, previa elaboración de un Proyecto en tiempo récord.

A mi me dicen que antes de publicar el PIALE unos cuantos listos bien informados ya tenían elaborado el proyecto y dada de alta la empresa que va a desarrollar el Plan, y me lo creo. Malpensado que es uno.

Veremos si hay sorpresas cuando salga la lista de centros adjudicados y empresas que se hacen cargo.