Seguro que todos habéis visto esas imágenes de gente recogiendo comida en un contenedor de basura, la escoria de la sociedad sobreviviendo al mismo nivel que un perro callejero.
Si además el camarógrafo tenía un poco de morbo ó el encargo de filmar morbo seguro que además habréis visto esas secuencias acompañadas de primeros planos de manos rebuscando bandejas de comida entre plásticos sucios, moscas, restos orgánicos en proceso de descomposición, objetos mugrientos e irreconocibles y de líquidos viscosos de color remotamente verdes o amarillos.
Pues no os perdáis el inicio del vídeo, os va a gustar ver donde y en que condiciones extraen los pescadores los majares del litoral valenciano. No, no la pesca de los parias y miserables, sino la pesca que llega a las terrazas de los chiringuitos a precio de viruta de oro.

Atentos a los primeros segundos del reportaje. Mediterráneo en estado puro. Si esto no es comer de la basura no se qué es.