Parece que el PSOE acorta la distancia en intención de voto con el PP. Yo estoy convencido de que a poco que hagan bien las cosas los del PSOE a partir de ahora, lo cual no es nada difícil partiendo del abismo en el que estaban hace unos meses, tienen en su mano volcar un buen puñado de votos “supuestamente peperos” en su favor. La clave para ello yo la resumiría en “tocar la fibra” del votante del PP factible de cambiar el voto y votarlos a ellos.
Y no me estoy refiriendo a la fibra que necesitarían para desbloquear la congestión intestinal que padece el PP (ni comiéndose a Coronado por los pies desbloquean ese intestino). No: El PP “gana” al PSOE en cargos imputados , y esa batalla no les interesa a ninguno. Bueno, no le interesa ni al electorado que acudirá en gran proporción a votarlos.
Yo me refiero a la fibra llamada “sensible”:
– Muchos votantes del PP son bellísimas personas. Reconozcámoslo.
– Escuchémoslos hablar, pidámosles su opinión, ganémonos su confianza.
– No entremos en batallas de “a ver quién es más…” Ofrezcamos nuestro respeto sin condiciones. Desde el primer momento hasta el final.
– Huyamos de “la dieta de las trincheras”; de lo de que quien no está conmigo está en mi contra.

Y digo que si el primer discurso público de Zapatero en el inicio de la campaña electoral articula las anteriores ideas, Rajoy permanecerá en el tablao de la mediocridad de donde no debería haber salido (eso sí, con mucha jarana taconeo, guitarra española, toros y vino, mucho vino; lo va a necesitar).

No obstante, nadie se engañe, la dieta de los “gatos gordos” de la “real politik” no ha cambiado nada en los últimos años. No os perdáis el siguiente vídeo de Tommy Douglas, cortesía de mi amigo Alargaor.