Estoy en estos dias trabajando enfrascado enanfixiado en un spot publicitario. Estoy realizando una integracion de video real e infografias.

Filmamos en Valencia unas secuencias callejeras de gente y calles. En una de estas secuencias, la que tengo ahora delante, un grupo de gente pasea por la acera hasta llegar a la altura de un semaforo. Estaba en el After Effect con el zoom puesto, dibujando el contorno de una señora, cuando veo que la señora se pone a mirar a camara sin parar de caminar… coño!! que casi la atropellan por mirar a camara!!

Y es que los seres humanos, y algunas personas, somos bichos sumamente curiosos, mas que curiosos interesantes, de ver, de observar, incluso cuando no hay nada que ver, incluso cuando no eres tú la que mira.

Le enseñas una camara de fotos/video a alguien, y despierta un interés que tiende a cero. Ahora bien, pones a un camera-man detrás y todo el mundo se gira, se agolpa para mirar al objetivo que los mira, ¿esperan verse reflejados? ¿Nos gusta saber que nos miran?

Cuando vivía en Madrid, e iba de compras a la Vaguada 2, a la salida me gustaba sentarme a fumar un cigarro en la acera antes de volver a casa. Me pasaba una hora, por la tarde al fresquito, observando a la gente. Pensando donde irán, de donde vienen, de que hablan, que los une.

Ahora ya apenas lo hago. Pero cuando me jubile me voy a pasar muchas horas en el parque viendo a los barquitos venir, a los barquitos pasar.